Abuelos, abuelas y educación

Seguramente que más de una vez te has parado a pensar el papel que los abuelos y las abuelas juegan en la educación de nietos y nietas. Y seguramente te has dado cuenta que en una infinidad de casos el papel es muy distinto del que representaron para nuestra generación, la de quienes ahora somos papás y mamás.
En nuestra época era más habitual que fuesen esa figura que está para malcriar y consentir, porque normalmente estábamos en casa con mamá y papá que eran quienes educaban y ponían límites y normas, pero hoy en día son muchísimas las familias (antes también se hacía pero no la medida que ahora) que recurren a ellos y ellas para hacerse cargo de hijos e hijas, en vez de llevarles a la escuela infantil o como complemento imprescindible a esta o al colegio.

En definitiva, pasan mucho tiempo con sus abuelos y abuelas, y se hace necesario plantearse ciertas cosas para que el mensaje educativo que les llegue a los y las peques sea uniforme. Por eso es más que conveniente que cuando se decide que abuelos y abuelas se encarguen del cuidado de niños y niñas se hablen las cosas, se consensúen normas y sepamos como se reacciona en determinadas situaciones o ante ciertos conflictos.

No se trata en ningún caso de imponerles a nuestros padres y madres lo que tienen que hacer. Son sus nietos y nietas y les consentirán si o si, mas de lo que hacían con nosotras y nosotros. Sin embargo, si tenemos que establecer unos mínimos comunes para que ciertas cosas sean en casa de la abuela lo mismo que con mamá: las verduras se comen en las dos casas, los deberes se hacen a la misma hora… aquellas normas o cosas que veáis importantes.
Y por supuesto, establecer una comunicación fluida para saber que hacen los y las peques, aunque nos oculten esas pequeñas travesuras, que sepamos si tienen algún problema o hay alguna dificultudad. Y también porque el mundo ha cambiado muchísimo desde nuestra infancia, la sociedad va muy rápido, las costumbres han variado y pueden verse superados o superadas en determinadas circunstancias, muchas cosas que valían con sus hijos e hijas no sirven para nietos y nietas. Que se atrevan a pedirnos a comentárnoslo, incluso a pedir consejo sin por ello sentirse inútiles o torpes está también en nuestra mano, no dando por sentado muchas cosas que vemos normales, teniendo paciencia y explicándoles las cosas necesarias.
Bueno, y si el día 26 de julio (día mundial de los abuelos y las abuelas) les hacemos una fiesta, les invitamos a comer, o tenemos un detalle, miel sobre hojuelas. Bueno, o cualquier otro día que el cariño y el agradecimiento, no tienen fecha.